Hoy sí.

Hay veces que no quiero ser yo, que las piezas que conforman mi existencia pesan tanto que no puedo sostenerlas.

Me miró despacio frente al espejo.

¿Por qué?

¿Por qué las dolencias que agrietan mi alma no pasan pronto?

¿Por qué las cosas duelen mucho incluso si son pequeñas?

Muchas veces he reprochado mi fragilidad, he querido ser alguien más.

No resulta entretenido el piso frío bajo mi piel desnuda, ni las lágrimas nublando la vista, mucho menos la dificultad para respirar…

Vulnerable, y no es malo, pero a veces sí.

Hoy sí.

Me agoto lento, me vacío a segundos.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Web construida con WordPress.com.

Subir ↑

A %d blogueros les gusta esto: